lunes, 16 de mayo de 2011


Sony ha tenido que lidiar con un verdadero infierno durante el último tiempo luego de que su plataforma de juego online “PSN” (PlayStation Network) se viera vulnerada por unos hackers que consiguieron sacar toda la información que quisieron de ella, inclusive números de tarjetas de crédito, lo que marcó a muchos y provocó el derrumbe de la compañía nipona en términos de confianza.

El anuncio realizado por el Vicepresidente Ejecutivo de Sony Corporation, Kazuo Hirai, dejó en claro que los servicios de PSN están volviendo a la normalidad poco a poco, y aunque la mayoría de las regiones en el mundo ya pueden gozar del entretenimiento online con su consola PS3, hay quienes tendrán que esperar un poco más (Japón por ejemplo). La importancia de este anuncio, y el que lo haya realizado el vicepresidente de la compañía, es gravitante puesto que fueron más de 24.6 millones de usuarios los que sufrieron el robo de información – los afectados más de 100 millones - y el nivel de la confianza está prácticamente por el suelo.

Aunque Sony trabaja arduamente para recomponer su imagen en el mundo de las consolas, hay que hacer hincapié en que los cambios de seguridad atrajeron una “nueva actualización” para los sistemas, algo que también seguro contrarrestará el nivel de “pirateo” que sufre PlayStation 3 gracias a distintos CFWs (Custom Firmware) que son distribuidos de forma gratuita o los ya clásicos “dongle´s” que se venden.

Lo interesante de este asalto tecnológico al que se ha visto expuesto Sony es que lo gatilló el quitar de los modelos PS3 la posibilidad de instalar Linux, pues se trató de una decisión unilateral que vinculó a todos los que querían jugar títulos originales online, ya que de una u otra forma obligaba a realizaractualizaciones del firmware del sistema, encubriendo con ello el deseo de cerrar brechas para jugar con copias de seguridad que comenzaban a quedar al descubierto.

PSN respira, pero aún no está del todo vivo

Millones de usuarios han reportado que a pesar de anunciarse que PSN sigue con vida, el sistema se cae e incluso, hay problemas para cambiar la clave de seguridad de sus cuentas de acceso, a lo que la compañía responde se debe a una saturación en las peticiones de usuarios por utilizar el sistema.

Los cortes en PSN se han vuelto parte del día a día y ya nada parece es igual, a pesar de que Sony se esfuerza por dejar en claro es algo “transitorio” pues la demanda por usar PSN es demasiado alta y la disponibilidad será intermitente por un tiempo.

Para quienes estén preocupados por la seguridad de su cuenta online, hay que decir Sony lanzará la actualización 3.61 para bloquear brechas de seguridad y acabar con la utilización de la plataforma de juego online con CFWs, cuestión que se hacía modificando las DNS de la consola.

Si bien la imagen de Sony con PlayStation 3 comienza poco a poco a restaurarse, desde que se anunció el 26 de abril del robo de información (vulneración de la seguridad de su base de datos y PSN), la falla está avaluada en cerca de 710 millones de euros, mientras que la baja en su popularidad no tiene precio de cara a lo que viene en el futuro con sus contrincantes Microsoft y Nintendo.